Nuestros Orígenes

Olivarera Nuestra Señora de Luna Nuestros Orígenes

Fue en 1958 cuando un grupo de jarotes deciden fundar la Cooperativa Olivarera, asignándole un nombre tan emblemático como es el de nuestra Patrona, la Virgen de Luna. La cooperativa está unida a la Hermandad, pues en su recinto se detiene Nuestra Madre en Pentecostés y la engalanan para que Villanueva la reciba con todos los honores que se merece; pero también en octubre, imagen y peregrinos inician su camino hacia el Santuario cruzando los patios de la Cooperativa.

Aquellos hombres que a mediados del siglo XX consiguen fundar la Cooperativa, dieron un paso trascendental para defender los intereses de muchas familias, que tiene en el olivar una importante fuente de ingresos. Algunos de ellos aún viven, otros ya no están, pero todos fueron valientes y decididos al iniciar esta empresa.

Nuestro olivar tiene unas peculiaridades propias pues se trata de un olivar de sierra con las dificultades que ello conlleva en su recolección. Pero a la vez proporciona en la época de recogida numerosos jornales, fundamentales para la economía de nuestro pueblo. También es destacable la características forma de delimitación, en pequeñas parcelaciones, que posee la zona del término municipal dedicada especialmente al olivar.

Desde el punto de vista medioambiental, tengo que decir que nadie nos puede dar lecciones, pues los jarrones han sabido respetar este entorno privilegiado en el que crecen los centenarios olivos, con su patrimonio natural que aún tenemos que desarrollar y conseguir que pueda ser admirado por todos aquellos que nos visitan.

El mundo cooperativista ha evolucionado enormemente en estos cincuenta años. La situación actual es muy distinta a la de los años de su fundación. Son momentos difíciles, con muchos intereses, por eso hoy es más urgente que nunca la unión entere cooperativistas, y la lucha por ir todos en la misma dirección que no es otra que la de una mejor defensa del producto, tan valorado a veces y otras tan depreciado.

Las distintas Juntas Rectoras han llegado las riendas de esta empresa de economía social que junto con los socios y los trabajadores han conseguido entrar en el siglo XXI con nuevas ideas y retos.